Tu hijo ha pasado del año y su alimentación cada vez se parece más a la de los adultos. Por eso tienes que enseñarle poco a poco nuevos hábitos, como comer siempre a la misma hora, intentar que lo haga por si sólo, y enseñarle a comer variado para evitar el aburrimiento.
Leches de crecimiento y nuevos sabores
En esta etapa tu hijo ya no necesita tanto aporte de nutrientes por kilo de peso, lo que puede hacer que deje de comer tan frecuentemente o te parezca que no come lo mismo que antes. Además, y antes de la introducción de la leche de vaca, que se recomienda hacer a partir de los 3 años, puedes empezar a cambiar a las leches de crecimiento, también conocidas como leches 3 y 4, con el aporte justo de proteínas, vitaminas y minerales y menor contenido en grasa saturada..
¡Combate la monotonía!
Por evitar la monotonía a la hora de comer, ofrécele al niño un menú variado y divertido, que le ayudará a ver la hora de la comida como algo ameno y no una rutina. Algunos consejos...
- Dale una dieta lo más variada posible, con el aporte de calorías necesario según la edad y actividad física de tu hijo.
- Edúcale en una dieta sana, la mediterránea es la mejor, y un estilo de vida saludable.
- No abuses de la sal.
- La leche y derivados lácteos deben ser el equivalente a 500 ml de leche al día como mínimo.
- Es importante que tome el desayuno de forma correcta y que se componga de cereales, lácteos y fruta.
- Los hábitos alimentarios adquiridos en los 2 primeros años de vida condicionarán los de los años siguientes.
- Acostumbra a tu bebé a un horario de comidas regular, evitando que pique entre horas.
- La hora de la comida debe ser alegre.
- Respeta el apetito de tu hijo sin forzarle a comer.
- Que el agua sea su bebida habitual, evitando las bebidas con gas y las azucaradas (sólo uso ocasional).
- Antes de los 3 años no le des frutos secos enteros, patatas fritas, frutas con semillas, caramelos y resto de alimentos que puedan causar atragantamiento, contener azúcar o demasiada sal.
- Anímale a comer sólo ¡será todo un reto que le motivará!
Buenos hábitos para evitar la obesidad
La tendencia actual para combatir la obesidad infantil es concienciar a la población sobre la importancia de reducir los azúcares simples de la alimentación de los niños.
Estas son algunas recomendaciones de la OMS para reducir la obesidad:
- Aumentar el consumo de futas y hortalizas, legumbres, cereales integrales y frutos secos.
- Reducir la ingesta total de grasas y sustituir las grasas saturadas por las grasas insaturadas.
- Reducir la ingesta de azúcares.
- Favorecer la actividad física y el ejercicio.
- La mejor manera de prevenir la obesidad en la etapa adulta es promover buenos hábitos alimenticios desde pequeños y promocionar un estilo de vida saludable.
Lechea 3
Las leches 3, son ideales para la alimentación de los niños de 2 a 3 años durante la transición de las leches de continuación a la leche de vaca, que tiene un nivel de sales y proteínas demasiado alto para el sistema digestivo y renal de los bebés que todavía no han madurado del todo.
La fórmula intermedia de bajo contenido en grasa saturada de las leches 3 tiene una concentración de proteínas y minerales inferior a la de la leche de vaca, además de estar enriquecidas con vitaminas y minerales como el hierro.
Pirámide
Calendario