Ya tienes a tu bebé en casa, la mezcla de alegría e incertidumbre durará unos cuantos días, ya que apenas os conocéis y todavía no conoces a qué se debe su comportamiento en cada ocasión. Podéis ayudaros mutuamente a través del masaje. Ambos os relajaréis y os sentiréis mucho mejor, mira estos consejos para que puedas dar el masaje a tu bebé de una forma segura y confortable.
Reconfortar al bebé está en tus manos
Solamente si practicas 15 minutos al día, podrás contribuir a que tu bebé esté mucho más relajado. No sólo lo estimulas, sino que además conseguirás numerosos beneficios. Y lo mejor, es que puedes hacérselo tú misma sola o con tu pareja, ya en las primeras semanas de vida. Ojo, ten cuidado si aun no se le ha caído el cordón umbilical, puedes probar a masajear la barriguita más adelante.
Ventajas del masaje infantil. Cuando ya se le haya caído el cordón, uno de los principales beneficios es que le ayudarás a hacer la digestión y favorecerás la evacuación de los gases acumulados. Si está dentando, el masaje puede relajarle y calmar las molestias de esta fase. También es beneficioso para ganar coordinación y flexibilidad de los músculos. El masaje, según varios estudios, puede colaborar y favorecer el estado físico del bebé, pero también influye en el desarrollo psicológico, aportando seguridad al recién nacido. Además refuerza el vínculo entre los padres y los infantes.
Así que están altamente recomendados por obstetras, los masajes y las caricias, al menos durante 15 minutos todos los días. Es un momento de tranquilidad para compartir con tu bebé, a la vez que lo motivas.
Estos son los 10 beneficios principales del masaje infantil:
Los beneficios de carácter psicológico y emocional
- Incrementa el vínculo entre los papás y los recién nacidos.
- Ayuda a que el bebé tome conciencia de sus partes del cuerpo.
Los beneficios físicos
- Hace madurar y regular los órganos gastrointestinales.
- Colabora en el momento de la digestión y reduce las molestias de los cólicos, y del estreñimiento.
- Tiene un efecto de relax y también de calma ante circunstancias como la fase de dentición o momentos de pesadillas.
- Fortalece los músculos y los tonifica.
- Alienta al sistema respiratorio, así como al inmunológico.
- Proporciona un mejor crecimiento y formación del sistema nervioso.
- Activa la circulación de la sangre y procura que el oxígeno llegue mejor a los tejidos.
- Al masajear se produce una leve fricción que hace que las células muertas existentes en la piel del bebé caigan.